En todas las instituciones, empresas, religiones, etc., se desea una lealtad entre los miembros, empleados o componentes del grupo.
En el mundo espiritual tanto Dios como Satanás han mandado sembrar sus respectivas semillas en todas partes: instituciones, empresas, etc. Por esto, la sociedad que no está preparada, puede recibir una puñalada de la persona que más confía. Diría más, aún estando preparados, nos encontramos con demasiados Judas en nuestras vidas.
La Iglesia Satánica, trata de filtrarse en empresas con fines malévolos, pero también en instituciones y política.
Los cristianos o siervos de Dios, actúan o deberían hacerlo, para favorecer en lo posible todo cuanto puedan, tanto en lugares de trabajo como comunidades. Su lealtad, debería ser una lumbrera por donde quiera que vaya.
En los países laicos, todo esto que explico se queda disipado en una ceguera espiritual sin precedentes en toda la historia de la humanidad. El resultado es un auge satánico imparable. Las autoridades que no quieren ver, se enterarán cuando se cansen de sentir DOLOR, ANGUSTIA, INJUSTICIA Y MUERTE.
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